El serbio Novak Djokovic ya está en semifinales del Masters 1000 de Montecarlo, a los que no llegaba desde cuando ganó el título en el 2015, luego de cobrar este viernes al Alex De Minaur, con parciales 7-5, 6-4.
Djokovic no había superado los cuartos desde ese año, pero sí había llegado a esa instancia en 2017 y 2019.
Sin afanes
Este sábado se medirá al noruego Casper Ruud (10), finalista en Roland Garros en 2022 y 2023, o al francés Ugo Humbert (15º).
“He sufrido pero estoy contento de haber pasado. Ninguno de nosotros dos jugó a un buen nivel y dio paso a la batalla física”, dijo el tenista de 36 primaveras.
“Una victoria es una victoria y estoy contento de clasificarme a semifinales”, precisó.
Sin retención, se refirió a su reacción tras los abucheos del sabido que se hizo presente en el atmósfera deportivo en un pernio pasado.
“No me estaba sintiendo cómodo ante Musetti, cuando la grada empezó a abuchearme. Yo no busco problemas con ellos, pero si empiezan a hacer eso, jugaré mejor. Si siento que no merezco eso, reaccionaré. Crecí con esa mentalidad”, contó.
Djokovic, una vez se percató de lo que estaba pasando, comenzó a hacer la mímica de un director de orquestina, lo que no cayó acertadamente en la concurrencia.
“Hice como que lo dirigía como una orquesta y aquello me ayudó a relajarme” , sentenció.